Los once rostros de la inquisión del siglo XXI

9 MUJERES Y 2 HOMBRES, RESPONSABLES DE LA COMISIÓN DE LA LIVG

Nueve mujeres y dos hombres fueron los principales responsables de redactar la ponencia que daría lugar a La Ley Orgánica de Medidas de Protección Integral contra la Violencia de Género, la monstruosidad jurídica más inquietante de todos los tiempos en España, que ha provocado la detención de casi un millón de hombres en apenas un lusto.

Las mujeres que participación como portavoces de la ponencia de un texto legal que nos retrotrae a los tiempos más negros de la Inquisición en España fueron las diputadas socialistas Esperanza Esteve Ortega y María Virtudes Monteserín Rodríguez; las representantes del Grupo Parlamentario Popular, Susana Camarero Benítez y Ana Torme Pardo; la diputada del Grupo Parlamentario de Ezquerra Republicana de Cataluña, Mercè Pigem i Palmés, la profesora de la Universidad de Deusto y parlamentaria del PNV, Margarita Uría Etxebarría; Carmen García Suárez en representación del Grupo Parlamentario Izquierda Verde-Izquierda Unida- ICV y Uxue Barkos Berruezo en representación del Grupo Parlamentario Mixto aunque pertenecía a Nafarroa Bai. Los varones, el socialista Julio Villarrubia Mediavilla y el miembro del grupo Parlamentario de Coalición Canaria Román Rodríguez Rodríguez, que sería más tarde presidente del Gobierno Canario.

El proyecto de Ley fue presentado por el Gobierno en el Registro General del Congreso de los Diputados el día 25 de junio de 2004, acompañado de una Memoria justificativa, de una Memoria económica, del Dictamen del Consejo de Estado, del Informe contrario del Consejo General del Poder Judicial, junto con los votos particulares, del Informe de la Fiscalía General del Estado, del Informe del Consejo Económico y Social y del Informe del Consejo Escolar del Estado, junto con los votos particulares.

Al proyecto de Ley no se presentó ninguna enmienda a la totalidad, lo que indica que todos los partidos políticos estaban a favor de penalizar al hombre como delito y a la mujer como falta por los mismos hechos. La Ley, por tanto, se aprobó por consenso de todas las fuerzas políticas.

EL AUTOR DEL BLOG

Estas son las once “mentes privilegiadas” dotadas de un “don divino” para decidir con “imparcialidad” sentido de la “ética” y “justicia” para decidir sobre el futuro de nuestros hijos en caso de separación de sus progenitores. ¿Dónde está aquí la tan cacareada paridad del PSOEZ?

DE LO DIVINO AL ABSOLUTISMO

Absolutismo, sistema político en el que se confiere todo el poder a un solo individuo o a un grupo. Hoy el término se asocia casi en exclusiva con el gobierno de un dictador. Se considera el polo opuesto al gobierno constitucional de sistemas democráticos. El absolutismo se diferencia de éstos en el poder ilimitado que reivindica el autócrata, en contraste con las limitaciones constitucionales impuestas a los jefes de Estado de los países democráticos.

El desarrollo del absolutismo moderno comenzó con el nacimiento de los Estados nacionales europeos hacia el final del siglo XV y se prolongó durante más de 200 años. El mejor ejemplo se encuentra, quizá, en el reinado de Luis XIV de Francia (1643-1715). Su declaración 'L'Etat, c'est moi' ('El Estado soy yo') resume con precisión el concepto del derecho divino de los reyes. Una serie de revoluciones que comenzó en Inglaterra (1688) fue forzando poco a poco a los monarcas de Europa a entregar su poder a los gobiernos parlamentarios.

En la historia de España pueden distinguirse dos clases de absolutismo; el primero, a imagen del que rigiera durante siglos en otros países europeos, se fundamentó en la concepción presidencialista del poder; el segundo, que marca una línea divisoria en el ámbito sociopolítico, se mostró permeable, a partir del siglo XVIII, a las ideas de los pensadores ilustrados y adoptó modos políticos paternalistas que fueron llamados despóticos. No obstante, esta influencia, no fue duradera y, a partir de la Constitución liberal de 1812, determinó el carácter agitado y sangriento del siglo XIX, y una alternancia violenta entre los gobiernos despóticos, nostálgicos del absolutismo, y las frágiles tentativas de los gabinetes liberales o constitucionalistas, que tendría su triste reflejo en la dinámica política del siglo XX: entre 1923 y 1975, con el paréntesis de la II República y la Guerra Civil española (1931-1939) dominaron la política del país dos largos regímenes absolutistas, las dictaduras de Miguel Primo de Rivera (1923-1930) y Francisco Franco (1939-1975).

ENCARTA

STATUS POR MANDATO DIVINO

Nadie tiene un status privilegiado por mandato divino. El rey no es rey por mandato divino sino porque sus antepasados se lo montaron divinamente. Esto es aplicable a toda la estirpe de la CASTA, pues, al fin y al cabo seguimos siendo gobernados por un grupo (“Absolutismo, sistema político en el que se confiere todo el poder a un solo individuo o a un grupo”), donde siempre mandan los mismos (los hijos de los hijos de los hijos…), ¿no es esto el más puro de los absolutismos? Es lo más parecido a una dictadura, camaleónica y mutante propia de los tiempos que corren, el caso es seguir los mismos en el poder, seguir los mismos ostentando el gobernar el mundo a su capricho y antojo.

En España, vivimos un bipartidismo o, rizando el rizo, un bi-absolutismo. El gobernar nuestro país se lo reparten por periodos de ocho años entre los partidos mayoritarios. Por norma general, todos los miembros (y miembras, jejeje..), suelen ser nuevos en el equipo de gobierno entrante, otra nueva hornada de politiquillos dispuestos a enriquecerse con sus amiguismos, deudas de favor, cambios legislativos y demás proventos, siempre en beneficio propio, la excusa, políticamente correcta. Es que todo se hace “en beneficio de la comunidad, en beneficio de la sociedad”. Pero la realidad es bien distinta, pues dado los sueldazos, dietas, gastos generales y demás excusas, es raro el politiquillo que no sale forrado cuando acaba su periplo amen de la enorme paga que le queda de por vida. La LIVG, es uno de los negocios más execrables y rentable que se ha dado en la historia de nuestro país. Con la industria del maltrato se han enriquecido tanto el gobierno como la oposición, pues no cabe otra explicación que justifique ese silencio, presuntamente ya pactado de antemano.

No podemos permitir que esta cuadrilla de herejes no paguen por sus delitos, por mucho que hayan cambiado las leyes, legislar con la única y clara intención de justificarse ante el pueblo alegando que se mueven dentro de un marco legal. Los nazis, en su exterminio, también cambiaron las leyes para moverse en un marco legal y justificar los miles de asesinatos cometidos, eso no ha evitado que fuesen juzgados por lo que hicieron, por lo que fueron; ASESINOS. La actual LIVG, no difiere mucho de lo ocurrido con los judíos a manos de los nazis, es más, se detecta cierto paralelismo aunque esta vez no se ha hecho por la fuerza de las armas. Esta vez se ha hecho legislando en contra de todo sentido de la justicia, se ha condenado injustamente a golpe de toga, se ha condenado al ostracismo a más de un millón de hombres en menos de una década, más los daños colaterales que de ello se desprende; sus hijos y familia extensa por parte de padre.

“En las ´democracias` actuales, con el voto creemos elegir a los arquitectos de nuestro futuro, pero la mayoría der las veces elegimos a los manipuladores de nuestro destino”

Stefan